Si en la anterior reunión habíamos comentado dos lecturas antibelicistas, este no lo es menos, pero desde una perspectiva diferente. En este caso, la autora y narradora inicia una relación epistolar con un soldado en la guerra de Irak, Melvin Mapple, que dice haber leído todas sus novelas. A lo largo de sus páginas el lector va conociendo los entresijos de esta relación y a este hombre que decide engordar como forma de rebeldía contra el ejército. Pero la situación se va complicando tanto que al final la historia da un vuelco sorprendente.
Luego te asaltan las dudas, ¿será real esta historia? Porque lo que sí sabemos es que hay autores que se cartean con sus lectores. ¿Qué busca la autora? ¿Hablar de sí misma o, simplemente, convertirse en un personaje de su propia obra? Este punto es lo que a algunas no les ha acabado de convencer y que ha levantado serias críticas.
En fin, una historia que trata de la falta de comunicación, de la soledad, del oficio de escritor, todo ello con grandes dosis de ironía.